Los gobernantes nos agradecen incrédulos el esfuerzo y la resignación con la que acatamos las medidas para salir de la crisis. Es cierto que las terrazas siguen estando llenas y se sigue celebrando con pasión el evento deportivo de turno. Aun se nos puede apretar más. Y lo harán.
En cualquier caso la mayoría de las medidas son para un futuro... nadie las nota aún: chaval en paro, que puede tirar con el dinero ahorrado de los padres -incluso comprarse un coche- y que por supuesto no piensa ni en su jubilación, ni en que mañana pueda caer enfermo y le hagan pagar de su bolsillo la sanidad.
Ya hay estudios que afirman que somos la primera generación que vivirá peor que la de nuestros padres. No me gusta la pasividad de la sociedad, el "Yo de política no entiendo" o el "son todos iguales" pero aún menos el escenario político en que vivimos que fomenta esa pasividad y nos tiene vacunados contra la rebelión.
Se nos esta obligando a fortalecer un sistema que nos ha llevado a la crisis. Un sistema democrático simplemente formal, no funcional.
Para la salida de la crisis no se vislumbra ninguna de las siguientes propuestas, ni siquiera se nos educa para poder pensarlas o por lo menos para poder plantearse, ¿por qué no?.
Para mi un mundo mas justo sería alguno que tuviera en cuenta alguna de estas consideraciones (quedaría ordenarlas). O por lo menos alguno en el que se pudiera oír hablar, se escucharan con algo de respeto, o se nos dieran a elegir cosas como:
- Eliminar paraisos fiscales
- Eliminar la economía sumergida
- Repartir el trabajo
- Equilibrio de sueldos entre los mínimos y los máximos
- Los pilares de la economía deberían estar basados en sistemas sostenible. (El crecimiento económico indefinido no puede ser si no es a costa del empobrecimiento de otros)
- Globalización económica vinculada al crecimiento de los países en desarrollo frente la idea de expolio.
- Control de la industria armamentística / venta de armas.
- Abolición de la monarquía como reflejo de una sociedad de iguales.
- El crecimiento económico de un país debe ir vinculado al índice de felicidad de sus habitantes.
- Mejora y creación de un sistema democrático funcional, no solamente formal.
- El motor político debe nacer de una reflexión filosófica de a dónde queremos llegar. Lo contrario a un gobierno de "tecnócratas" sin ideología (cosa que además es falsa).
- La riqueza de un país no podrá privatizarse.
- ONGs dependeran del estado que en última instancia es quién tiene la obligación de atender a sus ciudadanos.
- Las religiones quedan excluidas del ámbito público.
- Reducción del consumo energético por habitante. (Control de la huella ecológica) (reducción de proteínas animales, y transporte públic frente al privado).
El sistema político actual no permite el nacimiento de nada nuevo y de seguir así acabara por ser un cáncer para una mejor sociedad futura.